Archivo | agosto, 2012

El Centro de Huddinge, un lugar encantador

28 Ago

Adoro la zona central de la Municipalidad de Huddinge, al sur de Estocolmo: se trata de un conglomerado de edificios, empleados para actividades comerciales, culturales y administrativas. El cetro fue construido en 1902 y modernizado en 1985. Cuenta con 54 tiendas, 10 restaurantes y cafés, un escenario que se conoce con el nombre Sjdalsscenen, una Casa del Pueblo, una biblioteca, una iglesia, con su cementerio, Centros de Conferencias y hasta un estudio de Cine. Aquí les dejo algunas instantáneas que tomé en el anochecer de ayer a ver que les parece

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¿Novocastrismo como continuidad del neobatistato?

26 Ago

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 Batista junto al vicepresidente Nixon. Foto: latinamericanstudies.org

Leo con atención la nota de Emilio Ichikawa que comparte Arturo López Levy en  facebook: « Izquierda vetusta y novo anticastrismo: En la misma ansiedad, con casi la misma gente».

Lástima que Ichikawa no cite un solo ejemplo concreto que ayude a comprender el texto. De todos modos haremos un esfuerzo.

Por lo que entiendo de este artículo, cualquier superación del castrismo, para no hablar de oposición desde la izquierda será un pecado de «novocastrismo», es decir, que para el autor lo único honesto parece ser mantenerse en la vieja dicotomía anticastrismo-derecha versus castrismo-izquierda, al más puro estilo Edmundogarcíano.

Esto, es muy cómodo para la forma de pensar hegemónica en Miami y aún más para la que manda en La Habana, que siempre ha ocultado sus miserias  buscando aliados que no merece en la izquierda, presentándose al mundo como régimen nacionalista, antiimperialista, socialista, progresista, etc, etc, etc; cuando en realidad se trataba, para hablar al estilo de Ichikawa de un neobatistato, que por su papel de gendarme caribeño,  desestabilizador de proyectos democráticos latinoamericanos,  «hijo bobo» del campo socialista,  más otras cosas que sabremos en su momento, ha resultado mucho mas útil a los norteamericanos, de lo que fue el régimen del anterior tirano.

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 Fidel Castro saludando al vicepresidente norteamericano Richard Nixon, durante su visita a Estados Unidos en abril de 1959. Foto: latinamericanstudies.org

Por último, quiero recordarle, tanto a Ichikawa como a Levy que la critica de izquierda al castrismo es tan vieja como la revolución antibatistiana, otra cosa es que el régimen la haya ignorado del mismo modo que los medios hegemónicos del exilio.

La defensa derechista tardía del castrismo, que hace un académicos ex-marxista como es el caso de Arturo López, apoyándose en otro ex-marxista como Ichikawa, nos muestra que ese modelo nunca sobrepasó al fascismo y que sólo desde un paradigma totalitario, falsamente nacionalista, puede defenderse un sistema que no pierde su esencia autoritaria en la transición al monopartidismo de mercado.

Tema «olvidado»: alianza entre socialistas y republicanos

21 Ago

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Debo reconocer que siempre miré con cierta suspicacia la devoción de Marx por Lincoln, el gran ícono, incriticable de la nación norteamericana, sabía que por entonces los Estados Unidos estaban muy lejos de ser la gran vanguardia del capitalismo mundial, como apuntaba serlo, primer lugar, la Inglaterra Imperial y en segundo Alemania, pero tampoco, se me antojaba, que su evolución como nación apuntara al socialismo, bueno, menos apuntaba Rusia y ya vimos lo que pasó en 1917.

Por ello me ha parecido cuanto menos revelador el libro Lincoln´s Marxist (Los Marxistas de Lincoln, de los autores Al Benson, Jr y Walter Donald Kennedy, publicado el año pasado por Pelican Publishing Company.

Se trata de una Obra que profundiza en las relaciones entre Marx, Engels y Lincoln, de las posiciones socialistóides del último, cuyo concepto de la Unión fue muy alabado por el famoso socialista y nacionalista del siglo XX, llamado Adolfo Hitler.

También se aborda, entre otras ideas socialista, materializadas a nivel grupal o estatal en distintas épocas de la historia de ese país, la de la redistribución de la riqueza, algo a lo que Lincoln contribuye con la imposición de impuesto progresivo sobre la renta.

Lo último es suficiente para apoyar a los revisionistas de la guerra civil norteamericana, que ven en el cuento de la esclavitud, solo un pretexto para imponer una centralización que nada tiene que ver con el concepto federal con el que nació la primera unión independiente en tierra americana.

Entre los personajes que emergen obligatoriamente en esta obra, está el gran amigo de Carlos Marx, coronel Joseph Arnold Weydemeyer (2 de febrero de 1818, Münster – 26 de agosto de 1866, St. Louis, Missouri) quien llegó a alcanzar los grados de Coronel en el Ejército de la Unión; antes de emigrar en 1851 a Estados Unidos, habría presidido el capítulo en Frankfurt de la famosa Liga de los Comunistas, aquella de la que Marx y Engels escribieron su famoso manifiesto. Weydemeyer llegó a colaborar con Marx en la redacción de su famosa » ideología alemana»

Por supuesto, no se trata ni mucho menos del único socialista alemán emigrado a Estados Unidos, el éxodo de estos, se dio en masa después del fracaso de las revoluciones del 1948, y su actividad no disminuyó ni mucho menos en tierra extranjero, como demuestra esta obra donde se aborda la confluencia de este exilio con las tradiciones comunistas fundamentalmente religiosas que habían en Estados Unidos, de la coparticipación socialista en las elecciones de 1860, apoyando a de Abraham Lincoln como candidato presidencial, así como presencia de la legiones socialistas, alemanas y no alemanas, que lucharon del lado de las huestes lanzada por el presidente republicano contra los estados del sur. En una guerra donde se practicó un genocidio que prefigura el genocidio estalinista.

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Lo anterior es algo que  al norteamericano promedio le cuesta creerlo,  sobre todo cuando su aprendizaje de la historia de basa mas que en libros, en películas, como la mas reciente sobre Abraham Lincoln, convertido en cazador de vampiros, algo que resulta paradójico, cuando en ciertos términos económicos y políticos, al presidente leñador,podría considerársele como un chupasangre de estos.

Creo que este libro debería ser leído por todo el mundo, en especial por la derecha del exilio cubano en Estados Unidos, que de tan confiada y enamorada de ese partido republicano; admirado por José Martí, si, tanto como el revolucionario cubano, admiró, al margen de sus diferencias a Marx o a los anarquistas alemanes, ejecutados por los atentados que tuvieron lugar tras iniciarse la huelga del 1 de mayo de 1886.

En resumen, que hay que tener cuidado pues la liebre socialista salta donde menos se le espera, incluso en los orígenes del partido que en Estados Unidos se identifica por excelencia con la derecha. Eso tal vez explique por qué no solo los demócratas, a los que se identifica con la izquierda, sino también los republicanos han hecho lo que está en sus manos para mantener con vida el régimen de Fidel Castro, siempre usando un recurso tan socialista como es el estado, protegiendo el experimento de contaminaciones externas con el embargo y reconcentrando sus enemigos en lo que en principios era una ciudadela olvidada de la Florida.

Por último puede explicarnos porque se constata, pese a la retórica liberal, un control social tan fuerte sobre el ciudadano norteamericano, un control que la propaganda comunista extranjera suele utilizar sin reconocer que se trata, precisamente de una peculiaridad socialista, tal vez la que sembraron aquellos amigos de Lincoln, que antes de ser republicanos eran marxistas.

A propósito de la muerte de Trotsky: ¿Qué fue del trotskismo cubano?

19 Ago

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El próximo martes 21 de agosto se cumple el 72 aniversario del asesinato a manos del hijo de una cubana, del revolucionario de origen hebreo León Trotsky. Fue un asesinato muy raro, en el México Gobernando por Cárdenas, el cual mas que protección permitió que su país se convirtiera en la trampa donde el estalinismo pudo hacer con su mas poderos enemigos lo que no se atrevía en Europa. Una muerte que se complica con esos amoríos que tuvo el viejo Bolchevique , con Frida Kahlo, la mujer de su anfitrión Diego Rivera, sin respetar a su esposa, Vera, la misma que le cubriera con su propio cuerpo de una andanada de balazos.

Todo demasiado raro, como si con la Kahlo, se premiaran la forma en que le hizo bajar la guardia a Trotsky, en los mismos días que lo «maduraban», vuelve a ser aceptada por el comunismo mexicano, aquella organización tan complicada, en los dos intentos de asesinatos, uno con resultados mortales sufridos por el revolucionario en la tierra azteca.

Debo reconocer que durante un tiempo me fascinó la figura de León Bronstein que es como en realidad se llamaba aquel luchador bolchevique antes de prestarse el nombre de un carcelero. Incluso, busqué en su pensamiento la clave que enderezaría lo que el llamó para Rusia, como nosotros podríamos llamar para Cuba; la revolución traicionada.

Con el tiempo llegué a la conclusión de que Trotsky, si bien más honesto que Estalin y menos apegado al poder, por eso se dejó excluir de él, compartía con el georgiano una especie de sicopatía que le volvía indolente ante la muerte ajena, además de paso temerario frente a la protección de su propia vida.


Estando en Cuba, llegó a mis manos su autobiografía, por supuesto fascinante e instructiva pero no suficiente para conocerle plenamente, no por gusto nos enseña Marx que no se puede juzgar una sociedad ni a un individuo por lo que ellos dicen de si mismos.

Seguí buscando y no conseguí mucho más, siempre de manos privadas, que un ejemplar de Trotsky, El Profeta Desarmado, es decir el segundo tomo de la biografía dedicada por Isaac Deutscher al gran revolucionario, abarcado el período que va entre 1921 -1929,es decir desde el ascenso a la expulsión de la URSS, del viejo compañero de Lenin.

Tanto como el Trotskismo, me interesó la organización de sus seguidores en Cuba, sobre la cual escribí unos 15 años atrás, un artículo que he visto reproducir  como parte de un curso digital donde no se cita mi autoría, se lo atribuye un tal Lucas Quiroga Zubreski.Es sin duda alguna, un robo, pero como buena parte de lo que escribo, mi contribución desinteresada a dar a conocer las partes de nuestro pasado que la historiografía oficial cubana se ha saltado.

Sobre el tema del trotskismo cubano volví en mi aporte al libro La revolución cubana Miradas cruzadas, libro que recomiendo al interesado en ese proceso, y si del trotskismo cubano se trata, propiamente entonces, lo mejor sería acudir a una de mis fuentes principales, la obra The Hidden Pearl Of The Caribbean: Trostkysm in Cuba, del investigador Gary Tennad. un verdadero clásico en el tema.

Cuando salí de Cuba la situación con respecto al Trotskismo era muy similar a la que describe Leonardo Padura en la novela «El Hombre que amaba los perros». Una obra que nos marca el cambio de los tiempos, pues en ella sin bien se trata de comprender al asesino de Trotsky, se le concede al revolucionario la humanidad y consecuencia con sus ideales que se le negaba en Cuba, en aquellos años setentas donde se desarrolla, entre otros momentos, la historia, un tiempo en el que se pagaba caro, cualquier desviamiento ideológico de la ortodoxia dictada por los asesores soviéticos y sus discípulos formados en Moscú.

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Es más, el libro denota una franca admiración por Trotsky, la misma que encuentro en su biografía mas reciente publicada en Suecia, que es la traducción de la que escribiera Pierre Broue, allá por el 1997, casualmente el mismo año en que yo me dedicaba a reunir información sobre el trotskismo cubano. Por cierto Broue es muy crítico con Isaac Deutscher, a quien considera mas escritor que historiador, sobre todo demasiando benévolo con Estalin.

Esto no quita en medio de la ficción que implica toda novela, que la obra de Padura tenga un alto grado de objetividad, en ese aspecto para mí, ha sido un hallazgo que quiero recomendar, al interesado. Lo hago siempre señalando que no sale de un vacío, que la reivindicación de la figura de Trotsky, mas que la del trotskismo como una oposición socialista dentro del socialismo, es el resultado de tanto de un nuevo contexto, pos soviético, como de la acción de un grupo de intelectuales cubanos, algunos de ellos, vinculados a la ONG Pablo de la Torriente o el Centro Juan Marinello, quienes, volvieron hablar de Trotsky, cuando aún no se habían apagado los ecos del anatema, lanzado por Fidel Castro, el 15 de enero de 1966, contra aquel movimiento  en el Teatro Chaplin de La Habana, durante la clausura de la Primera Conferencia de Solidaridad de los Pueblos de áfrica, Asia y América:

Y así, si ustedes me dan un poquito de tiempo, entre tantos datos voy a buscar uno muy interesante.

¡Ah, lo encontré!  (RISAS Y APLAUSOS)  Es un cable de la UPI de diciembre 6 de 1965 que dice:  “Ernesto Guevara fue asesinado por el Primer Ministro cubano Fidel Castro (EXCLAMACIONES) por orden de la URSS (EXCLAMACIONES) —declaró Felipe Albaguante, jefe de los trotskistas mexicanos en declaraciones a “El Universal”.  Agrega que el Che fue liquidado por insistir en poner a Cuba en la línea china (EXCLAMACIONES).

Esto, naturalmente, venía a tono con una campaña que comenzaron a desatar los elementos trotskistas en todas partes simultáneamente.

Y así, con fecha octubre 22, en el semanario “Marcha”, se publica un artículo en que un conocido teórico del trotskismo, Adolfo Gilly, afirma que “el Che salió de Cuba debido a discrepancias con Fidel por el conflicto chino-soviético y que el Che no pudo imponer su opinión en la dirección.”  Dice que “el Che, en forma confusa, propugnaba la extensión de la Revolución al resto de América Latina, en oposición a la línea soviética.”  Dice que “la dirección cubana está dividida entre un ala conservadora, que incluye a viejos dirigentes del PSP, los partidarios del Che, y Fidel y su equipo en una posición de oscilación centrista conciliadora.”  Dice que “el Che salió de Cuba por carecer de medios para expresarse y que Fidel temió enfrentarse a las masas para explicar el caso Ché.”

Este mismo teórico del trotskismo el 31 de octubre de 1965 como reportero de “Nuevo Mundo”, un periódico italiano, escribe un artículo calificando a la dirección cubana de “filosoviética” y acusando a Fidel de “no haber explicado políticamente al pueblo lo ocurrido con el Che”.  Dice que “el Comandante Guevara fue derrotado por el PSP y el equipo castrista”; critica al Che por “no haber llevado a las masas la lucha por imponer su tesis” y concluye que “el Estado cubano, paralizado por su propia política, no apoyó abiertamente a la revolución dominicana”.  y sobre esto me voy a referir más extensamente un poco más adelante. 

En el número de octubre de 1965, el periódico “Batalla”, de los trotskistas españoles, declara que “el misterio que rodea el caso del Che Guevara debe ser aclarado”.  Dice que “amigos del Che suponen que la carta leída por Castro es falsa y se preguntan si la dirección cubana se orienta hacia una sumisión a la burocracia del Kremlin”.

Por la misma fecha aproximadamente, el órgano oficial trotskista de Argentina publica un artículo en el que asegura que el Che está muerto, o preso en Cuba.  Dice que “entró en conflicto con Fidel Castro por el funcionamiento de los sindicatos y la organización de las milicias”.  Agrega que “el Che se oponía a la integración del CC con los favoritos de Castro, especialmente oficiales del ejército, seguidores del ala derecha de Moscú”. 

Pero uno de los escritos más sucios, más groseros y más indecentes es el que escribió el dirigente del Buró Político Latinoamericano de la Cuarta Internacional en el periódico “Lucha Operaria”, de Italia.  Sobre este artículo, largo por cierto, solo voy a leer tres párrafos.  Empieza diciendo: 

“Un aspecto de la agudización de la crisis mundial de la burocracia es la expulsión de Guevara.  Guevara ha sido expulsado ahora, no desde hace ocho meses.  Ocho meses ha durado la discusión con Guevara y no han sido ocho meses que pasaron bebiendo café, han luchado duramente y quizás ha habido muertos, quizás se ha discutido a golpes de pistola.  No podemos decir si han matado o no a Guevara, pero existe el derecho a suponer que lo hayan matado.  ¿Por qué Guevara no aparece?  No lo han presentado en La Habana por temor a las consecuencias, a la reacción de la población, pero en definitiva, al esconderlo, producen el mismo efecto.  La población dice:  ¿Por qué Guevara no sale, no aparece?  No hay ninguna acusación política, existen elogios políticos en relación con él.  ¿Por qué no han presentado a Guevara?  ¿Por qué no ha hablado?  ¿Cómo es posible que uno de los fundadores del Estado obrero cubano, que hasta hace poco tiempo recorría el mundo en nombre del Estado obrero, imprevistamente diga:  ‘me he aburrido de la Revolución Cubana, voy a hacer la revolución en otra parte’?  Por otra parte, no dicen dónde ha ido y no se presenta.  Si no hay ninguna divergencia, ¿por qué no se presenta?  Todo el pueblo cubano comprende que hay una lucha enorme y que esta lucha no se ha terminado. 

“Guevara no estaba solo ni está solo.  Si toman estas medidas contra Guevara es porque hay una gran tendencia, muy grande, que está de su parte.  Y además de una tendencia muy grande, hay una enorme preocupación del pueblo. 

“Hace poco tiempo el gobierno cubano publicó un decreto bastante severo:  ‘es necesario restituir todas las armas al Estado’.  En aquel momento la cuestión era un poco confusa, ahora está claro qué fin tenía esta resolución, era contra la tendencia Guevara.  Tienen miedo de un levantamiento.”

Otro párrafo:  “¿Por qué han hecho callar a Guevara?  La Cuarta Internacional debe llevar adelante una campaña pública en ese sentido, exigiendo la aparición de Guevara, el derecho de Guevara a defenderse y discutir, a hacer apelación a las masas, a no fiarse de las medidas tomadas por el gobierno cubano, porque son medidas burocráticas y quizás de asesinos.  Han eliminado a Guevara por callar su lucha, han hecho callar a Guevara.  No obstante que su posición no fuese consecuente desde el punto de vista revolucionario, porque tendía hacia la armonización de sus posiciones en la tendencia revolucionaria.”

Y más adelante dice:  “Esto demuestra, no la potencia de Guevara o de un grupo guevarista en Cuba, sino la madurez de las condiciones en el resto de los estados obreros para que en breve tiempo estas posiciones fructifiquen.  No se engaña a la burocracia con maniobras y medidas de este género.  La eliminación de Guevara significa para la burocracia la tentativa de liquidar una base de posible reagrupamiento de tendencias revolucionarias que continúan el desarrollo de la revolución mundial.  Esta es la base de la liquidación de Guevara y no solo por el peligro que representa a Cuba, sino porque incluye el resto de la revolución latinoamericana. 

“Al lado de Cuba está Guatemala, al lado de Cuba está Guatemala con el programa de la revolución socialista y, no obstante, su fuerza y los discursos de su líder máximo Fidel Castro, no ha podido impedir que el Movimiento ’13 de Noviembre’ se transforme en un movimiento socialista revolucionario y que luche directamente por el socialismo.”

No es absolutamente casual, ni mucho menos, que este señor dirigente de la Cuarta Internacional, mencione aquí muy ufano el caso de Guatemala y del Movimiento “13 de Noviembre”, porque precisamente con relación a este movimiento el imperialismo yanki ha usado una de las tácticas más sutiles para liquidar un movimiento revolucionario, que fue filtrarle los agentes de la Cuarta Internacional, que —por ignorancia, por ignorancia política del dirigente principal de ese movimiento— lo hicieron adoptar nada menos que esa cosa desacreditada, esa cosa antihistórica, esa cosa fraudulenta que emana de elementos tan comprobadamente al servicio del imperialismo yanki, como es el programa de la Cuarta Internacional. 

¿Cómo ocurrió esto?  Yon Sosa era, sin duda, un oficial patriótico.  Yon Sosa encabeza el movimiento de un grupo de oficiales del Ejército    —en cuyo aplastamiento, por cierto, participaron los mercenarios que después invadieron Girón—, y a través de un señor que era comerciante, que se encargó de la parte política del movimiento, la Cuarta Internacional se las arregló para que ese dirigente, ignorante de los problemas profundos de la política y de la historia del pensamiento revolucionario, le permitiera a ese agente del trotskismo —acerca del cual nosotros no tenemos la menor duda de que es un agente del imperialismo— que se encargara de redactar un periódico en el cual se copiaba “de cabo a rabo” el programa de la Cuarta Internacional. 

Lo que la Cuarta Internacional cometió con eso fue un verdadero crimen, contra el movimiento revolucionario, para aislarlo del resto del pueblo, para aislarlo de las masas, al contagiarlo con las insensateces, el descrédito y la cosa repugnante y nauseabunda que hoy es en el campo de la política el trotskismo (APLAUSOS).  Porque si en un tiempo el trotskismo representó una posición errónea, pero una posición dentro del campo de las ideas políticas, el trotskismo pasó a convertirse en los años sucesivos en un vulgar instrumento del imperialismo y de la reacción. 

Por cierto, a propósito de los truenos de arriba, Gary Tennant tiene un trabajo muy interesante sobre la cercana relación que tuvo el Che Guevara con  los trotskystas cubanos que tambien recomiendo, puede bajarlo pinchando aquí.

El  Trotskismo movimiento dividido en su perspectiva de Cuba, lo que trae una especie de relación de amor-odio con la revolución castrista, con sectores que tratan de atraerla para su hoguera en polémica con quienes ven en ella la repetición del mismo Termidor estaliniano que aniquiló el trotskismo soviético.

Y hay que recordar entre los rescatadoras del trotskismo cubano a Celia Hart, cuya muerte por un «accidente» en el 2008, no deja de recordarme al que dejó sin vida al otro extremo del diapazón ideológico a Oswaldo Payá.

Pero Trotsky tenía sus pecados y pagó por ellos, no sólo por la mano de hierro con la que reprimió como comisario del ejército, no solo a la contrarrevolución blanca, sino a todo enemigo de la dictadura de su partido, fuera menchevique, eserista o anarquista, el contribuyó a la creación de ese «hombre nuevo», o de los métodos para formarlo, capaz de matar por un ideal, sin comprobar previamente si su enemigos no buscan mas o menos lo mismo, como hizo Ramón Mercader cuando le enterró en la cabeza, el pico de romper hielo. Por cierto el documental «Asaltar los cielos» (1996) de José Luis López-Linares y Javier Rioyo sobre Ramón åarece ser una de las fuentes en que se basa Padura para su libro, por algunos parlamento que aparece del material que parecen practicamente transcritos en el libro.


De alguna manera Mercader era parte de lo mismo que Trotsky; había ayudado a cosntruir un aparato de muerte que no se detenía ante ningun otro principio que no fuese la «construcción del comunismo».

Hoy cuando la URSS es cosa del pasado, quedan unidos en un mismo lado por sus orígenes jacobinos, compartidos que tienen el trotskismo y el castrismo. Sería bueno ya que una parte del Trotskismo, parecen dispuestos a claudicar ante el Raulismo como antaño hiceran con el Fidelismo, que allí, en la trinchera, los trotskistas del extranjeros, le preguntaran al régimen cubano, cuando serán reivindicados sus camaradas cubanos represaliados en los sesentas, como pasa hoy con los homosexuales, cuando tendrían su «disculpa» aquellos seguidores en la isla del «viejo» asesinado en Coyoacán por un Mercader premiando con el cargo de asesor de prisiones en Cuba.

La pregunta es cuando tendrán los Trotskystas -si vuelven a Cuba, como paerec por el Observatorio Crítico que están volviendo los anarquistas- mismo margen de difusión de sus ideas que tienen por ejemplo los seguidores del Vaticano. Luego podremos discutir quienes son los que han traicionado a la Revolución.

Fallece Eduardo Ojeda Camaraza: figura destacada de la socialdemocracia cubana

17 Ago

Eduardo Ojeda Camaraza, representando al grupo Arco Progresista durante una sesión de Conseso Cubano. Foto: Carlos M. Estefanía

Me informa Arnoldo Muller, miembro de la directiva de la Coordinadora Socialdemócrata de Cuba del fallecimiento  en la madrugada del compañero Eduardo Ojeda Camaraza . «El abuelo», como le llamaban sus compañeros; había nacido en Pedro Betancourt, provincia de Matanzas hacía 86 años.

Ojeda Camaraza fue un auténtico hombre de acción, se sumó en sus inicios al grupo creado por revolucionarios descontentos, con desviación del nuevo gobierno tras la caída del Batista: el Movimiento de Recuperación Revolucionaria( MRR).

Se infiltró en las costas de Cuba en los días del desembarco en Girón en abril de 1961, pero a diferencia de los invasores fue capaz de cumplir con éxito su misión de llevar armas para la Guerrilla que intentaron impedir el establecimiento de un modelo neoestalinista en Cuba.

Estuvo alzado hasta que cayó preso, cumpliendo 18 años de prisión. Esto le da un conocimiento sobre el sistema cubano y la forma de pensar que tienen los que le defienden, del que carecen muchos de los primeros exiliados.

Nadie podría imaginar este período de su vida al conocerlo en su etapa superior, reformista del exilio, Ojeda fue de los fundadores de la Coordinadora Social Demócrata de la que fue Presidente por dos periodos consecutivos. Se trata de un partido que dentro del exilio se alinea a los sectores moderados defensores del trazado de puentes y del diálogo entre todos los cubanos. Se ve, que como en el caso de Mandela, otro hombre de acción, la cárcel fue una escuela donde se moldeó su espíritu.

Al surgir Consenso Cubano, Ojeda Camaraza fungió de delegado ante el pleno de Consenso de la organización socialista democrática cubana Arco Progresista, un grupo formado dentro de la isla por hombres y mujeres nacidos después de la revolución, en su mayoría con orígenes africanos, gente del pueblo allí donde las hubiera, lo que convertía al abuelo en una suerte de puente entre generaciones.

Y tuve el honor de presenciar  una de las reuniones de Consenso no solo el respeto  y la consideración con la que era tratado el socialdemócrata, sino la entrega y sabiduría con la que actuaba en representación de su juveniles camaradas de la isla.

Y en mas de una ocasión tuve información de la importante actividad de ese destacado sector disidente por los partes que me llegaban, reenviados por el propio Ojeda Camaraza, era un activista que  no importa su edad, no paraba de trabajar por la causa de su patria.

Me dice Muller, se le descubrió al Abuelo que tenia leucemia, tres meses antes del 17 agosto del 2012, día en que falleció  a las 5 horas AM.

Desde aquí hago llegar a la señora Carmen, viuda de Ojeda, así como al resto de los familiares, amigos y compañeros de Eduardo, mis más sentidas condolencias y las de mis colegas de Cuba Nuestra.

Se marcha un hombre  que en la tenaz búsqueda de caminos, que en el ensayo y el error había, lo que será la solución para la tragedia de Cuba: el diálogo y la reconciliación. Lo descubrió sin dejar de ser por ello, un luchador de toda la vida, para robarle la expresión al poeta, de los imprescindibles.

Descansa en paz compañero,  tienes un sitio en la memoria de tu pueblo.

Modig y Tiroler. Cuestionados a la sombra del alcornoque

17 Ago

Alcornoque sueco. Foto: Carlos M. Estefanía

Hace poco tuve un breve debate con un amigo, quien me decía que en Suecia no  hay censura. Yo le decía que no se censura en el sentido que conocemos, en el llamado comunismo, pero sí en otra dimensión y le traía como ejemplo, uno, que no puede tener mayor actualidad, pues ha colocado el nombre de la justicia sueca y no precisamente para su bien, en la palestra internacional.

Me refiero al caso de una de las acusadoras de Assange, Anna Ardin, cuyo nombre se menciona permanentemente por las sectas internacionales que tiene su Meca en Cuba, incluso la desinformada población de la isla, sabe de ella. En cambio, su nombre encubre en Suecia, aquí la media para referirse a ella no para  decir: «una de las mujeres que acusa de ser violada».

A la censura en «democracia» y el modo de combatirla podría dedicarle un tratado, no es esta la oportunidad. De todos modos puedo adelantar que ella existe como ralentización de informaciones claves, como privilegio de cosas banales frente a lo que de verdad podría interesar, como un dejar decir en tribunas marginales mientras que el medio poderoso, disemina las posiciones que le interesa a los actores del poder, quienes llegan a un consenso, pueden ser varios, mas no tantos como el ciudadano de a pie.

Luego nos demostrarán con un libro de tirada ínfima o una nota minúscula en la media o en la prensa que apenas pudo descubrirse, entre tanto espacio dedicado al chisme, historias del corazón, deporte y publicidad; que existe la «libertad de expresión».

La mejor resistencia, será buscar ese libro subversivo, ese texto poco conocido y darle la mayor visibilidad. Eso es lo que quiero hacer con un artículo, mas que importante, publicado por el bloguero Peter Solilander, en su página de bucólico nombre «Under den Lugna korkeken» bajo el tranquilo alcornoque. El texto se publicó el 15 de agosto de 2012, se titula «Kubas propaganda seger över Modig» lo que en español significa «La propaganda de Cuba vence sobre Modig».

Según el autor de esta entrada, el tema de si Aarón Modig dice la verdad ha comenzado a ser discutido después de éste llega a Suecia. Aunque para ser honestos este es el primer autor sueco que veo poner el dedo sobre la llaga en línea directa con los comunicados de la Sociedad Académica Euro cubana.

Rosa María Payá se lamenta  en su cuenta de Twitter del olvido de Modig



Y es que, como también se dice en el blog, se trata de un a cuestión muy delicada, ya que rompe muchas de las nociones sobre el espacio de Cuba en los medios de comunicación suecos: se trata tanto odio como amor, además de lo excepcional del accidente.

Resulta sorprendente que en texto se cite a uno de los mas rabiosos voceros de la Asociación Sueco cubana, Gabor Tiroler –ver una vieja nota que le dedicamos en la antigua página de Cuba Nuestra– cuyo nombre de connotaciones magiares, siempre me lo antoja, relacionado con los colaboracionistas que ayudaron a aplastar la revolución húngara.

En el video de arriba tenemos a Tiroler lamentando la destrucción de Irak por los norteamericanos, lástima que no le preocupe la destrucción de Cuba por sus admirados Castros.

Tiroler es presentado en los panfletos de la Asociación Sueco Cubana, de cuya filial en Uppsala es presidente, como especialista en Salud Pública y coordinador de la red de medicinas para Cuba. Con tal cobertura, resulta difícil  sospechar de lo mal que quiere este hombre a esa isla, cuando por años ha servido al régimen que la hunde en el mar.

Del último de esos favores nos habla Solilander, cuando nos dice que el coordinador de medicinas, ha salido en defensa del «tratamiento cubano» que le dieron a Modig.

Y no viene mal recordar aquí, el silencio del grupo de Tiroler en relación al joven democristiano durante la semana que el régimen cubanos lo tenía desaparecido, un silencio que acompañaba con la algazara por la libertad de los espías enviados por La Habana a los Estados Unidos.

De las pulgas que se gasta el «doctor», en las palabras que le dedica a el acompañante español de Modig que el blog cita:

Le deseo al delincuente descuidado de Carromero una larga estancia en prisión. Se merece un castigo, y Modig también. Si un cubano hubiera hecho eso en Suecia, lo que Modig ha hecho Cuba, entonces el cubano habría ido a la cárcel aquí.

Lo gracioso de la expresión, es que no hay nada mas parecido a lo que pudo haber hecho Modig en Cuba que lo que hace Tiroler en Suecia, intentar difundir una ideología, la del castrismo, que va, aparentemente, contra el sistema imperante, cada uno a su manera.

¿De donde le viene esta animadversión de Tiroler, contra los sobrevivientes del accidente, que no expresan ni siquiera los familiares de Cepero o Payá?: Del daño que le hace a sus trabajo de agitador castristas, las entrevistas de Modig con la prensa. Son estas comparecencias, a pesar de sus desmemorias y reticencias, las que están haciendo durar a la opinión pública sueca y Peter Solilander nos da un buen ejemplo cuando se pone a razonar sobre esto.

Según el blogero, la entrevista de Modig con la radio P1, dejó una especie de vacío y deduce, partiendo de la tesis de que las autoridades cubanas pueden manipular a cualquiera que esto también se cumpliría para Modig.

El bloguero publica una de las foto de auto, el gráfico oficial de lo ocurrido mas lo que Gabor Tiroler ha escrito sobre del accidente, y analiza las informaciones.

En la página se reproduce un escrito de Gabor Tiroler, que no hace otra cosa que repetir lo que difunde el gobierno de Cuba:

«Un fascista español conducía sin licencia a 120 kilómetros por hora en una carretera en mal estado, donde el límite de velocidad era de 60. En el coche había tres pasajeros. Habían viajado a un total de ochocientos kilómetros en ocho horas. Era en Cuba no en la E4 (carretera sueca conocida camino de Europa 4). El coche se salió de la carretera y murieron dos de los cuatro pasajeros.»

Comentando el texto de arriba el bloguero sueco se hace varias preguntas:  la de sí, Gabor Tiroler sería capaz de juzgar la calidad de las carreteras, con más facilidad que como «adorna»  los puntos de vista políticos del conductor Ángel Carromero.

¿Por qué Carromero conducía tan rápido? -esta pregunta es muy buena- ¿A quién se le puede quitar la idea de que el coche de Aron Modig era perseguido? ¿Quién puede estar durmiendo o dormitando en un coche que circula a 140 Km. / hora en un camino por el que hay que circular a 60?

En la opinión de Peter Solilander, y en esto coincido con él, muchas indicaciones apuntan a que Aron Modig se convirtió en la víctima de un chantaje y amenazado con el futuro político de Ángel Carromero, para que no hablar de Suecia; también que la descripción del accidente es una construcción del gobierno que no encaja.

El bloguero asocia lo ocurrido con el reciente conflicto diplomático que se ha dado entre Suecia y Bielorusia después que el pasado 4 de julio, como parte de la campaña «Estudio Total», una avioneta sueca entró en territorio bielorruso lanzando más de mil ositos de peluche en paracaídas con mensajes contra Lukashenka. Y afirma, que se puede criticar que Aarón Modig fue a Cuba por su cuenta, mas el riesgo era bastante bajo en comparación con atravesar Bielorrusia lanzando osos de peluche como hicieran los activista de Estudio Total; mientras que violar el espacio aéreo bielorruso debe significa entrar en la cárcel por la eternidad, de acuerdo con las normas actualmente vigentes en ese país, pero quien recibió la culpa, fue la Embajada de Suecia en Bielorrusia.

Las sospechas de Estudio total, nos dice el redactor, es, la de que, fue la KGB de Bielorrusia la que los invitó a entrar al país, para ganar luego una victoria propagandística tras ponerlos en libertad; no habiendo ahora, Embajada de Suecia en Bielorrusia; resulta difícil para el gobierno sueco poder ayudar a los que son encerrados por la policía del ex país soviético.

Una conclusión similar podría sacarse para Cuba, piensa el bloguero, ya que los dictadores tienen a menudo una tendencia a pensar con el mismo patrón.

En esto no estoy del todo de acuerdo, comparado con Fidel Castro, Lukashenka es un niño de pecho, compárese el tratamiento dado a Estudio Total por las fuerzas armada bielorrusas a quienes en 1996 le hicieron algo muy similar en Cuba, los Hermanos al Rescate (Ver mi artículo ¿DONDE ESTA EL PIRATA? ), derribados sobre el mar, gracias en parte a la información ofrecida por espías como los que defiende Gabor Tiroler.

Pero quizás a un nivel mas abstracto tenga razón Peter Solilander, y no se equivoque, al creer y afirmar que Cuba quería ganar una victoria propagandística con la liberación de Aron Modig. Eso es, lo que para nosotros, ha quedado evidente desde el primer momento que escuchamos las declaraciones de Aron Modig en La Habana, declaraciones, jamás puestas en entredicho, mas bien confirmada por lo que después respondió Modig en Suecia.

¿Tal vez tuvo que firmar una carta de libertad antes de que le soltaran? se pregunta este redactor que lo que menos tiene es de tranquilo o de alcornoque, por lo menos si se le compara con Tiroler. Y con ello, se adelanta al total de la prensa sueca, que hasta el momento no se atreve a exponer la cuestión de manera tan clara.

Es mas la teoría del Peter Solilander me hace repensar en el caso de un Modig cubano con el que tuve amistad hace algún tiempo, en nombre de esa extinta amistad me reservaré su nombre, no así la experiencia que aquí transmito; en su momento fue uno de los mas desatacados activistas de nuestro exilio, que en colaboración con una de las constituciones que nos apoyaba, viajó a Bielorusia, con la misma misión que Aron Modig a La Habana, a llevar dinero a los opositores de aquella nación eslava. El caso es, que el hombre fue arrestado por la policía bielorusa y mas tarde liberado, aparentemente a cambio de nada. Con el tiempo, dicho personaje se convirtió en uno de los principales propulsores del contacto de las organizaciones suecas que trabajaban por la democracia cubana, con los grupos que en el exilio reciben subsidio de Estados Unidos. ¿Existe una relación causa y efecto entre el arresto y este comportamiento, o fue un acto de simple y llana estupidez que favorece al enemigo? No podría responderlos, pero con lo expuesto por el chico del alcornoque una vez más me lo planteo, a la sombra de los estrechos lazos de amistad que siempre han existido entre Minsk y La Habana .

Solilander termina el texto recordando, a propósito del final de los Juegos Olímpicos, que las palabras célebres de Shakespeare: Ser o no ser, puede aplicarse a la política también. Aunque no siempre es necesario, podran haber interrogantes con Modig, mas con Tiroler, sabemos su «ser» : defensor de una dictadura, no importa si se nos disfraza con la bata de un médico o con el habito de un cura.

Gracias Peter Solilander por dejarlo tan claro, además diseminar las dudas que los medios establecidos están retardando. No importa, a seguir martillando.

Lección de un acto grotesco: a Cuba la tienen que salvar sus hijos, no los extranjeros

16 Ago

No nos cabe duda de que poco a poco se irá abriendo camino la verdad sobre lo que pasó en Cuba con Oswaldo Payá, y que para ello, Jens Aron Modig sigue siendo un  elemento clave en este misterio, sino además, un manual abierto de lo que puede esperar Cuba de un extranjero.

Pos su parte la Sociedad Académica Eurocubana hace lo suyo, enviando comunicados a la prensa, que aunque alguna vez puedan ser censurados, y esas censuras quedarán para la historia, son leídos y asimilados por los encargados de crear opinión en estas tierras, es decir los periodistas. Estos poco a poco han ido cercando a Aron Modig; que se negó a dar en Suecia, la conferencia abierta a los medios que dio en Cuba, hasta el momento, se ha ido entrevistando de uno en uno con los periodistas nacionales, concediendo entrevistas, que a veces se notan cortadas.

Una de las últimas, fue publicada el Jueves, 16 de agosto a las 22:03 en el sitio digital del periódico de orientación cristiana Världen idag (El Mundo hoy): bajo el título de «Grotesk situation på Kuba» ( «Grotesca situación en Cuba) « se presenta una conversación de Modig con la periodista Eva-Janzon.

Además de repetirse lo que todo el mundo ya sabe, aquí, se aclara, que el lider del KDU no podrá regresar a Cuba nuevamente para reunirse con miembros de la oposición, sin embargo, se transmite su opinión, de que es bueno que los suecos vayan allí, impidiendo con su presencia que Cuba  se convierta en un país aún más aislado. Así mismo cree que todos los intercambios entre los extranjeros y los cubanos de a pie son buenos, incluso aunque el dinero que se les entregue termine en manos del Gobierno.

La que aquí  falta es consejos sobre como actuar cuando a ese extranjero la seguridad del estado le echa mano, y lo pone hablar ante los medios, sacando partido propagandístico a cada una de sus palabras; siendo un experto por la experiencia; sería hora de que Modig nos explicara, más que el modo de salir ileso, la manera de reparar la solidaridad dañada.

Otro punto que la SAEC ha destacado es la falta de contacto entre Aron Modig y la familia de Oswaldo Payá, incluso, antes de que el sueco regresara a Suecia. En el periódico, Modig afirma que tiene esperanzas de restablecerlas en el futuro.

En el artículo también se responde a una de las preguntas realizadas por la Sociedad Académica Eurocubana en uno de sus comunicados para esclarecer el origen del famoso dinero llevado por Modig a La Habana y sus objetivos.

Según Mundo hoy, los 4.000 euros que traía Modig estaban destinados a familias de padres detenidos por sus opiniones políticas, y provenía de la Internacional Demócrata Cristiana Centro (CCI), no de instituciones norteamericanas, como los voceros del gobierno cubanos, incluido Edmundo García, en Miami, estaban difundiendo.

Así mismo Modig, como hiciera el Che con su carta a Fidel Castro, limpia de responsabilidad al Estado, en este caso al Sueco. Dice que Suecia no da ninguna ayuda oficial al movimiento por la democracia en Cuba, pero que organizaciones cercanas a su partido, como el Centro Democristiano Internacional(CCI), y el Centro Internacional Liberal Sueco (SILC), durante años han mantenido un diálogo y los intercambios con la oposición en Cuba,  mediante el apoyo a los medios de comunicación independientes, como dándole a la gente la oportunidad de comunicarse libremente con el mundo exterior.

Aron Modig no deja claro un asunto y es, sí la seguridad del estado cubana ha logrado penetrar esas instituciones que suelen alimentarse de donaciones públicas y privadas y tentarlas para aceptar la moneda americana. Esa es la forma que tiene el régimen cubano de reducir a la nada, el movimiento democrático, facilitando y luego exponiendo su financiamiento por otro estado.

Tras exponer lo que hizo Modig durante su viaje a Cuba de 2009, donde el objetivo era proporcionar apoyo moral, así como conversar sobre la democracia con la gente del Movimiento Cristiano Liberación, el artículo cierra, abordando lo que se debe hacer en la situación actual.

En la opinión de Modig los cubanos darían la bienvenida a un enfoque más internacional sobre Cuba, pues esto significa cierta presión sobre el régimen.

Lo último no está mal, pero siguen habiendo lagunas en el discurso sobre Cuba que Modig está dando en Suecia. Sigue habiendo falta de respuesta de su parte al emplazamiento público que le está dando la Sociedad Académica Eurocubana, en su propio idioma, ni explica que es lo que espera para llamar por teléfono a los deudores de Payá; transmitirle, cuanto menos, sus condolencias, ni tampoco lo que aguarda para pedir perdón al movimiento democrático cubano por el daño que le hizo con su mea culpa (para usar una frase de mi colega Germán Díaz) en La Habana.

Cuando Modig suspendió su conferencia de prensa programanda para el 3 de agosto,  tuve el gusto de ofrecer ese mismo día,  mi opinión al reportero Nelson Rubio de Actualidad 1020, una radio de Miami, y decirle allí, con el micrófono al aire -todavía espero la grabación por cierto- de Aron Modig y su «talante»; hice la historia que muy pocos saben, de esa colaboración de mas de 15 años han tenido SILC, CIC y otras instituciones con el movimiento democrático cubano,, Pero además, señalé el bien que nos llega por el mal que aún Modig nos hace. Que no hay que esperar a que sean suecos o españoles los que nos saquen las castañas del fuego, pues con Modig y Carromero, tenemos el ejemplo, si chocan de lo «chuecos» que salen.

Los que tienen que ir a Cuba y ayudar a sus hermanos tienen que ser en primer lugar los propios cubanos, del mismo modo que hace Edmundo garcía para recolectar material fresco para sus algarabía. No pretendo que sean los grandes políticos, ni los deportados, ni ningún activista de esos a los que el régimen tiene registrado, sino el cubano de a pié, el desconocido, el hombre sencillo que lleva a su pueblo en el corazón, es ese, con dinero de su trabajo -como en tiempos de José Martí-, con sus voz, con su respaldo moral o material quien tiene que ayudar al movimeinto democrático, y lo mejor será, viajando a Cuba, para encontrar allí, al que cada día, como Payá, arriesga su vida por la Libertad.

No se trata de darle un no definitivo al extranjero bueno que nos quiera ayudar, habiendo como hay por el mundo tanto mercenario que defiende al sistema que oprime y humilla al cubano, se puede agradecer la mano del amigo y al mismo tiempo saber de quien es la prioridad a la hora de actuar, de no olvidar lo que cabe esperar cuando se reclutan para la causa, quien no pertenece al pueblo al que le aprieta el zapato: españoles, suecos o mexicanos, como los papagayos enviado por el Directorio Democrático cuando la última visita papal.

¿Saludable la mariguana?

14 Ago

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Militares mexicanos arrancando plantas de mariguana. Foto Oswaldo.

Aunque apruebo y difundo, en general, lo que escribe mi viejo amigo Eduardo del Llano, creo, que esta vez,  se ha equivocado con su escrito «Saludable». Un texto que habría quedado muy bueno de no ser por la promoción gratuita, traída por los pelos en relación al resto, que hace al final de la mariguana. Esta quizás «no mata» inmediatamente, pero ocurre con ella, lo mismo que el cigarro y el cáncer, que en los casos propensos, enloquece, por no hablar de otros efectos o formas de actuar a las que impulsa y que a la larga también liquidan.

Por supuesto en tiempos maltusianos donde sobra la gente, todo vale, por ejemplo, promoviendo la droga y así el sacar del paso una juventud reproductora. A ello contribuyen los medios, el cine y hasta la literatura, presentando como una gracia lo que es una desgracia, exaltando falsos modelos de triunfo como esas viejas estrellas del rock, las mismas que Eduardo del Llano admira, borrachas, cuando no enmariguanadas; promoviendo, como movimiento de izquierda, lo que en realidad es, una fórmula ultraliberal de mercado, la complacencia con este vicio, cuando todavía no hemos podido derrotar el alcohol o el tabaco.
Esta vieja «moda» de la droga, en particular las  permitidas,  sirvió ya en el pasado  para someter los pueblos al poder de  oriente a occidente,  del capesino ruso, pasando por el obrero irlandés para llegar al indio iroquez. Hoy  se espande como  ideología que encubre una razón utilitarista elemental:con ella ganan las empresas y ganan los estado, las primeras con las ventas, los segundos, además de con los impuestos; ahorrándose con los muertos tempranos, millones en pensiones y atención de ancianos.

Una vez más; reivindicación del diálogo: A propósito de los ataques al Llamamiento por una Cuba mejor

14 Ago

Ejemplares del libro Pasión y Razón de Cuba en los anaqueles de La Universal, en Miami.

Confieso que tuve mis dudas cuando llegó a mis manos el documento «Llamamiento urgente por una Cuba mejor y posible», no tanto por su contenido, que comparto, sino por el puesto prominente que ocupaban en la primera lista que llegó a mi, figuras cuya trayectoria les presentan como auténticos candidatos, a ser agentes de la seguridad del estado.

Incluso, me plateé la hipótesis de que se trataría de una operación de lavado de imagen iniciada por la seguridad del Estado.

Luego me comuniqué con uno de sus promotores, Oscar Peña, veterano disidente cubano por el que siento gran respeto, sobre todo por el modo ético y visionario en que hace su política. Y fue gracias a sus explicaciones y paciencia, que mucho agradezco, que sumé mi firma en respaldo de un documento que comparto más allá de los traidores que puedan haber en la lista. En definitiva con los recursos que tiene el Estado cubano, hay que dar por sentado la omnipresencia de sus agentes.

Y si pensaba en principio, que se trataba de una operación, no menos dudas despiertan en mi, la fiereza con la que desde Miami, centro del espionaje del cubano, se han dedicado a atacar al documento, usando como argumento, que implicar un diálogo, casualmente el mismo que siempre he reivindicado, como queda claro en mi libro Pasión y Razón de Cuba; obra cuya vigencia se reactiva con la muerte de Oswaldo Payá, a cuyo proyecto Varela se le dedican dos ensayos. Y me atrevería a decir, conociendo como conozco la línea de pensamiento de el fallecido disidente, que él habría respaldado una propuesta que encaja perfectamente en la Cuba que había soñado.

Los que nunca van a compartir ese documento, serán los hombres estrechos de mira, o los justamente adoloridos cuyo sufrimiento les vuelve ineptos para la acción, política, los que dentro y fuera de la isla viven del conflicto pueblo-gobierno, de los que necesitan una nación dividida. En resumen, de una masa de gente buena con pocas luces a las que arrastra lucifer con su iluminación malvada. Para una muestra, véase el «contra llamamiento» que publica Emilio Ichikawa en su página. Es parte de una válida libertad de expresión, que implica también la respuesta que aquí damos.

El objetivo del ataque al documento, por demás bajo, involucrando hasta la madre de uno de sus redactores, va mas allá de satisfacer con tropezones, la ceguera de los agresores.

Se trata de mantener la pelea en el sitio que mas favorece a los Castros, de evitar la pelea cuerpo a cuerpo que significa el reto del diálogo: Mantener el exilio aislado de su pueblo, usando infiltrados con disfraz de intransigentes, que ante cualquier acción inteligente se dedican, a agitar pasiones y obnubilar mentes; en resumen el boicot, lo hacen sin presentar alternativas, que en su caso, debería ser, como los auténticos intransigentes del pasado, respaldando sus palabras con los actos, es decir alzando el machete contra la opresión, que es la única manera de demostrar que dicen lo que de verdad sienten.

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  Cartel de propaganda intransigente

Si de verdad les interesara el futuro de la isla, dejarían de usar sus muertos como argumentos, pues lo que dieron la vida, no la dieron para buscar venganza, sino para encontrar la libertad de su patria, eso es lo primero. Si de verdad quisieran crear las condiciones donde se pueda hacer justicia, deberían entonces dejar de atacar a quienes con inteligencia trabajan por construirla, sin dejarse manipular por aquellos intereses económicos, geopolíticos, mediáticos y hasta policíacos que necesitan ver la tierra en que nacieron sometida a una dictadura, aunque públicamente digan atacarla. Si de verdad aman a Cuba pararían de emular al perro del hortelano, que ni come, ni deja comer en la ardua tarea de encontrar caminos que nos han de llevar a la patria justa, libre y de bienestar que siempre hemos querido.

Modig: «subversivo» servidor del totalitarismo

12 Ago

Aron Modig está recomendando a sus seguidores en Twitter que lean el editorial que le dedicó  el 11 de agosto de 2012, el periódico digital NWT.SE,  bajo el título de «Modig på Kuba» (Modig en Cuba)
Aquí se comentan las declaraciones del presidente de la Liga de la Juventud Demócrata Cristiana a varios medios de comunicación suecos sobre la semana de pesadilla en la isla; según el editorialista, se trata, definitivamente de un panorama nada halagador para la dictadura comunista que allí impera, lo cual, según el redactor de NWT no debería ser una noticia para aquellos que tienen los ojos y los oídos abiertos.

Así mismo se lamenta, NWT de que por desgracia, en el país escandinavo todavía existen muchas personas preocupadas por Cuba-o mas exactamente por Castro, que comparten la visión del régimen cubano sobre la participación de Modig en actividades subversivas.

En el artículo se dice que la familia de Payá afirma que se trata de un ataque orquestado por el régimen,aunque eso no es exacto, la familia lo que hace es cuestionar la versión oficial del accidente, mientras que Modig, según las palabras del periódico, se mantiene » comprensiblemente cauto» y dice que recuerda mucho mas, de que ellos perdieron el control sobre el carro y que este se salió de la carretera.

El autor de la nota justifica, además, que Modig mide sus palabras con el hecho de que Carromero quedó en Cuba, acusado por las autoridades de homicidio.

El editorial afirma que el duro tratamiento recibido por Modig es una forma consciente de disuadir a otros para que no viajen a Cuba, para ayudar a los disidentes del país y que en el peor de los casos el régimen cubano puede querer dar un ejemplo, condenando a Carromero a una pena de prisión de varios años. Pero eso no debería detener al mundo exterior para que de cualquier forma que podamos defender la democracia, la libertad y los derechos humanos para el pueblo cubano. El texto cierra citando a Modig cuando dijo a Dagens Nyheter: «Fui a la mejor de las intenciones de contribuir a una sociedad más libre en Cuba, pero fui encarcelado e interrogado. Así se tratan a los cubanos todos los días. »

Muy bonito y comprometido, pero esta lejos de ser suficiente. De lo primero primero que debería darse cuenta el editorialista, es de que el castrismo no necesita de sus sobrados agentes en este país para presentar a Modig como un agente subversivo, el mismo les hizo el trabajo, diciendo en la conferencia de prensa que dio en Cuba, es decir en la rueda abierta que no se ha atrevido a dar en Suecia, todo lo que el régimen necesitaba para presentar al movimiento democrático cubano en general y en particular a la rama juvenil que se intentaba generar dentro del Movimiento Cristiano Liberación, como una creación extranjera, ni siquiera sueca, sino de Estados Unidos, y no como la reacción natural de un pueblo oprimido.

Así, lo irónico no es que Modig haya ido con las mejores intenciones a Cuba y haya terminado encarcelado, es lo lógico, salvo que se identifique con Cuba tanto a los que allí oprimen como a los oprimidos, que es lo que dio a entender Jens Aron Modig con sus vergonzosas disculpas.

Y lo de menos es la información que hubiera podido dar a quines le retuvieron durante una semana, pues estos como en cualquier estado totalitario sabían de él, y de  todo lo que había hecho en Cuba y mucho más. Modig no les hubiera hecho mejor servicio a los militares cubanos que el que pudo haberle hecho a sus colegas bolivianos Régis Debray (ya que hablamos de «subversión internacional), cuando fue capturado e interrogado sobre la guerrilla del Che.

Pero lo que si pudo haber hecho Modig es repetir el gesto de Debray durante su proceso en Camiri, convertir la sala,  inundada de prensa, en una tribuna para justificar ante el mundo, su actividad «subversiva». Seguramente habría salido mejor parado que el colaborador de Guevara, condenado por los bolivianos a 30 años de cárcel, de los cuales cumplio 4. En una situación similar lo menos que le convendría a La Habana, sería deportar a Modig, no llevarlo a un juicio que arreciaría el escándalo. Incluso sería la oportunidad para Modig de escribir a partir de su alegato un equivalente demosristianos de Revolución en la Revolución.

El fráces le hizo su alegato basado en sus ideas comunistas de entonces, el sueco, bien podía haberlo hecho, difundiendo aquellos valores democráticos y cristianos, que parecía compartir con Payá, esos mismos que,  como un Pedro renegado, asustado por la guardia pretoriana, pareció olvidar, tanto como  los detalles, del modo en que murieron los dos accidentados.

Si Modig de verdad quería ayudar Cuba, esa fue su mejor oportunidad: ese fue el momento de lanzar un alegato ante la prensa internacional en defensa de los valores democráticos por los que había acudido a la isla y denunciar la opresión que sufre su pueblo, si no lo hizo, tenemos derecho a sospechar que fue por miedo o peor aún por pactar su salida de Cuba con el gobierno.

Y si a Modig le faltó el arresto de los héroes o de los convencidos en una causa, por lo menos debería tener la honestidad para deshacer el entuerto en que dejó a aquellos que creyeron en él en Cuba, por ejemplo, encabezando una campana internacional que se esclarezcan los hechos donde murieron Payá y Cepero, que casualmente es lo mejor que podría beneficiar al propio Carromero que parece ser la única persona que le preocupa en Cuba.

Carrocero, no necesita de Modig, tiene detrás una embajada, un estado, un partido, un gobierno y seguramente el dinero que velará por él. Todo aquello de lo que carecen y a lo que se enfrentan Ofelia Acevedo y Rosa María Paya, las verdaderas heroínas de esta historia, NWT debería publicar sus denuncias desde Cuba, a ver si leyéndolas, Modig recupera la memoria y deja de servir al totalitarismo.